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Imagen Fantasma

EN EL MUNDO DEL DESEO
Wei Tang en Lust Caution de Ang Lee





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Cuando fuí a ver Lust Caution
en el Festival de Cine, reafirmé
mi percepción: a Ang Lee
(su director) le gustan los riesgos
y la intensidad emotiva.

Tras crear un Hulk (2005) con crisis existencial y transitar por las vías de dos cowboys quienes en busca de cariño ingresan a un torbellino de sensualidad gay (incluída una de las últimas performances de Heath Ledger junto a Jack Gyllenhaal) en Brokeback Montain (2007), Lee vuelve a los temas politicos, la lucha de ideas en su China natal. Pero en este caso, la temática no gira en un mundo ideológico o panfletario. En Lust Caution (o Deseo y Traición, como la han traducido acá) los elementos guía son la traición y el sexo: la entrega del cuerpo en pos de un ideal.

Si bien dicen que el cuerpo es un campo de batalla, también creo que es un arma de guerra… y en la guerra algunas veces los ideales se pueden confundir y el amor y deseo sofocar toda meta, destino o propósito. O mejor dicho aún, el dominio sexual puede ser más fuerte que toda doctrina impuesta o cualquier revolver en la sien. Y ahí es que damos con Wei Tang, esa bella actriz china que debuta en este film y nos entrega una emotiva performance al lado del gran Tony Leung, uno de los mejores actores del cine actual (pregúntenle a Wong Kar Wai).

Wei Tang interpreta a Mak Tai Tai, una jovencísima muchacha quien casi como jugando ingresa al teatro político estudiantil, causando entrega y pasión en su público. Las vías de la intensidad juvenil la llevan (junto a sus amigos) a dejar las tablas e ingresar a la acción y así, termina involucrada en un complot político donde mantendrá un romance ilícito con su peor enemigo, entregando su cuerpo y alma en una puesta en escena de amor y pasión externa unida a su amargura y rechazo interno. Wei Tang carga sobre sus hombros el peso de su inicio fílmico (a la vez que su primer protagónico) pasando de la candidez de una joven estudiante con buenas intensiones patrióticas a la espía seductura quien con sus juegos sexuales encandila al enemigo de rigor, no sin antes perder en el camino la inocencia, el destino de su misión y el control de sus sentimientos.

Como todos saben, el mundo del amor, la entrega y lo sentimental es un huracán de intensidades que turba toda mentalidad y puede sabotear toda idea, arrastar tu cuerpo por los caminos más extraños y hacerte llorar o reir sin que uno pueda tener control. Así, nuestra Mak Tai Tai cae en un remolino donde pierde la perspectiva y su misión de espionaje se transforma en una exploración de su sexualidad y de su amor (ingenuo en un inicio pero siempre tocado por el sadismo y los juegos de poder)… Todo esto dentro de un marco muy importante, por no decir clave: Mak Tai Tai era virgen, y su enemigo Tony Leung es quien desbarata ese pasado virginal y la lleva de la mano, a tropezones por este mundo oscuro del sexo como poder.


Trailer de Lust Caution

Wei Tang encarnando a Mak Tai Tai, transita esta jornada sexual… sensual… erótica... en un viaje directo a la muerte, dejando atrás todo rastro de inocencia infantil. El panorama de Mak Tai Tai se vuelve confuso y el sexo es una vía de exploración y sufrimiento, y aquí es donde Ang Lee demuestra su maestría. Maneja cargadísimas escenas de sexo, un erotismo muy intenso alejado totalmente a los estereotipos que nos suelen rodear. El sexo no existe por gusto: el sexo es una línea de narración, una pauta de exploración. La expresión de estos personajes, sus deseos, sus pulsiones, su línea se expresa mediante las sólidas escena de amor y placer. La cama es un escenario donde los personajes y los actores despliegan su confusion mental, su cerebro que es un remolino de amor, odio, rabia, candidez, éxtasis, debilidad y pasión. Este es un film intenso donde Wei sale a la luz a este mundo de deseo y traición. Tang Wei es estremecedora.

Escrito por: Francisco Alvarez


+ INFO
- Ang Lee en festival de Venecia
- Website de Tang Wei
- Entrevista a Tang Wei



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